“Por un Estado sin Pitutos”: Consejo Constitucional realiza audiencia para analizar iniciativa popular de norma
El presidente de Pivotes, Bernardo Larraín, fue quien expuso ante la comisión de Sistema Político, Reforma Constitucional y Forma de Estado. La propuesta ahora se incorporará al trámite del proceso constitucional junto con las restantes iniciativas y enmiendas admitidas.
Bernardo Larraín, presidente de Pivotes; Juan José Obach, director ejecutivo de Horizontal, y Cristián Stewart, director ejecutivo de IdeaPaís, llegaron hasta la sede del Congreso Nacional en Santiago para presentar ante el Consejo Constitucional las propuestas de habilitaciones constitucionales contenidos en la iniciativa popular de norma “Por Un Estado sin Pitutos”, que se convirtió en la cuarta iniciativa más apoyada de entre más de 1.300 presentadas, con más de 18.700 apoyos ciudadanos.
“El desafío de modernizar el Estado es uno de los que aparece de manera más transversal en la agenda política chilena. Está siempre presente en los programas de gobierno y ha sido objeto de consensos técnicos transversales. Además, la contingencia ha hecho evidente ciertas fallas estructurales del Estado que subyacen a la crisis asociada a la asignación directa de recursos públicos a ciertas fundaciones, llevando a que este tema haya crecido en importancia entre las demandas ciudadanas”, afirmó Bernardo Larraín.
La iniciativa presentada, que se expuso ante la comisión de Sistema Político, Reforma Constitucional y Forma de Estado, se centra en tres puntos: el régimen de empleo público; la autonomía del ciclo político de ciertos espacios del Estado; y la institucionalización de una cultura y práctica de evaluación de impacto de las políticas, programas y acciones públicas, y del gasto público.
Entre las propuestas, destaca la separación explícita entre Gobierno y Administración del Estado, a fin de atribuirle al primero su conducción política y la definición de políticas, planes, programas y acciones públicas; y a la segunda su implementación, además de la provisión de servicios públicos de calidad.
Asimismo, se busca precisar que la ley consagre el referido régimen de empleo público, incluyendo un procedimiento de evaluación de desempeño así como la facultad de desvinculación fundada con el correspondiente sistema de seguro de desempleo o de indemnización por años de servicio. “Estimamos que en esta materia es fundamental que el empleo público se asimile al régimen del empleo privado, en algo tan básico como es la evaluación de desempeño y la posibilidad de cese o cambio de las personas que ocupan los cargos”, agregó Larraín.
En paralelo, el texto busca establecer que la ley incluya una regulación especial para los funcionarios de exclusiva confianza de los gobiernos de turno, coherente con su condición excepcional y limitada. “Este tema está detrás de la crisis relacionada con las asignaciones directas de recursos públicos a ciertas fundaciones. Cuando las personas que son responsables de administrar importantes recursos públicos son seleccionados por un criterio de cercanía política y no por sus capacidades y experiencias, aumenta la probabilidad de ocurrencia de malas prácticas como las que hemos conocido. Debemos avanzar hacia un Estado más profesional y técnico”, añadió el presidente de Pivotes.
Finalmente, la iniciativa propone que la nueva Constitución precise los tipos de servicios públicos que deberán gozar de autonomía o independencia: aquellos que poseen competencias para dictar normas de carácter general, los que fiscalizan actividades económicas esenciales y los que prestan servicios de utilidad pública a las personas. Con esto, se busca reforzar la gobernanza de los órganos de la Administración del Estado que intervienen en áreas muy relevantes para los ciudadanos.
“Nuestra mirada es que la modernización del Estado –tan consensuada como postergada- debe ser habilitada desde la Constitución con orientaciones y lineamientos más precisos, para que luego los legisladores diseñen, debatan y acuerden las leyes que le den la estructura y el diseño específico”, concluyó Larraín.