Juzgado de Garantía de Puerto Montt encuentra culpable a médico de un cuasidelito de homicidio
El veredicto entregado este sábado por el juez Miguel García, fue condenatorio contra el médico, Paul Aguirre Vivanco quien entregó un mal diagnóstico a Joaquín Rosas Collao, quien falleció por Hanta Virus a los 13 años.
El hecho ocurrió el 21 de junio de 2015 en la ex clínica universitaria de Puerto Montt, en la actualidad Clínica Andes Salud, donde el niño de 13 años, estudiante del Colegio San Francisco Javier, tuvo un mal diagnóstico, sin que el médico Paul Aguirre Vivanco, de nacionalidad ecuatoriana, lograra identificar que se trataba de Virus Hanta lo que padecía.
La fiscal Pamela Salgado, llevó adelante el caso, cuya indagatoria fue encargada a la PDI de Puerto Montt.
“Hoy se dictó veredicto condenatorio contra el doctor Paul Aguirre Vivanco por un cuasi delito de homicidio en perjuicio del menor Joaquín Maximiliano Rosas Collado. Recordemos que esta es una causa que data del año 2015, oportunidad en la cual el menor Joaquín Rosas Collado ingresó a la (ex) Clínica Universitaria, hoy día (Clínica Andes Salud) en Puerto Montt, con un cuadro de fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, de hacía varios días”.
Explica en su relato la persecutora penal que fue internado el 20 de junio del 2015 y se le asignó como médico tratante el pediatra Paul Aguirre Vivanco, médico de nacionalidad ecuatoriana, el que tras un test rápido diagnosticó una neumonía por micoplasma y se mantuvo en ese diagnóstico durante todo el día del 20 de junio, “no obstante el menor comenzó a presentar signos de gravedad, presentando una insuficiencia respiratoria a lo largo de la tarde del día 20 de junio. Dan cuenta y así también lo informaron las enfermeras y personal de salud que declaró en el juicio oral de que hubo intentos de llamado al doctor Paul Aguirre en al menos cuatro oportunidades en la tarde (y) noche del 20 de junio dado que la situación del menor se agravaba, que el imputado no compareció a ver al paciente, que a las 3.55 (horas) de la madrugada del día 21 de junio, la situación del menor Joaquín Rosas en una cama básica de atención, como es la que mantenía en esa época la Clínica Andes Salud, estaba en una fase crítica, necesitando con urgencia apoyo de ventilación mecánica”.
Sostiene la abogada que sin embargo, “el doctor Paul Aguirre concurre a la clínica, mantiene el mismo diagnóstico y el mismo tratamiento con cuidados básicos paliativos, no reconoce la gravedad del paciente, no realiza una gestión correcta de obtener cama en el Hospital Base de Puerto Montt para hacer un traslado oportuno del menor. Muy por el contrario, reconociendo el estado de gravedad del paciente, toma la decisión de retirarse a su domicilio, que a las 9 de la mañana del día 21 de junio, conforme declaró personal paramédico y médicos de la clínica Andes Salud, se apersonó en la clínica solo al requerimiento de otra médico, a la cual personal de enfermería le pidió ayuda, exigiendo la presencia del médico tratante en la clínica, hora en la cual la situación de Joaquín lamentablemente era de un estado agónico”.
Agrega la fiscal que “cuando finalmente se logra hacer el traslado, gracias a la gestión de otro médico, no del doctor Paul Aguirre, el menor fue finalmente trasladado alrededor de las 11 de la mañana al hospital base de Puerto Montt, donde finalmente falleció producto de un shock séptico. Entró en paro y fue imposible salvarle la vida”.
Remata Pamela Salgado que “se diagnostica causa de muerte síndrome cardiopulmonar por Hanta Virus. No obstante, no es cierto de que el doctor Paul Aguirre siempre se mantuvo en un diagnóstico de neumonía por micoplasma pese a el estado y avance de gravedad del menor y pese a que otros médicos del mismo centro asistencial vieron en el menor síntomas posibles de Hanta Virus”.